El estrés en el trabajo desde casa: una realidad cada vez más común
Desde hace varios años, trabajar desde casa se ha vuelto una tendencia en constante crecimiento en todo el mundo. El avance de la tecnología y la posibilidad de realizar nuestras tareas sin tener que trasladarnos a una oficina nos ha permitido ahorrar tiempo y dinero en desplazamientos, y nos ha brindado una mayor autonomía en la gestión de nuestro tiempo. Sin embargo, como en todo, también tiene un lado oscuro.
Uno de los mayores problemas que las personas que trabajan desde casa enfrentan es el estrés. Aunque para muchos pueda parecer contradictorio, trabajar desde casa puede generar niveles de estrés más altos que hacerlo en una oficina. A medida que nos adentramos en este artículo, vamos a profundizar en las principales situaciones que suelen generar estrés en aquellas personas que trabajan desde casa.
La dificultad de separar el trabajo de la vida personal
El trabajo desde casa puede brindarnos una libertad importante respecto de nuestro tiempo y nuestros horarios. Sin embargo, esa libertad puede convertirse en una maldición si no establecemos una clara separación entre nuestro trabajo y nuestra vida personal. Muchas personas que trabajan desde casa suelen tener dificultades para desconectarse del trabajo al final del día, lo que puede afectar negativamente su calidad de vida personal.
La falta de interacción social y el aislamiento
Otra situación que puede generar estrés es el aislamiento social que muchas veces suelen experimentar aquellas personas que trabajan desde casa. Al no tener contacto con otros compañeros de trabajo cara a cara, las personas pueden sentirse solas, incomprendidas y aisladas. Además, esto puede dificultar el intercambio de ideas y la colaboración que muchas veces se da en los espacios de trabajo comunes.
La gestión de nuestro tiempo y nuestro espacio de trabajo
Aunque la gestión del tiempo y del espacio de trabajo pueden ser uno de los mayores beneficios de trabajar desde casa también se pueden convertir en un foco importante de estrés. La gestión adecuada del tiempo es fundamental para poder cumplir con nuestras tareas de manera efectiva y no terminar trabajando durante horas más de las establecidas.
¿Qué podemos hacer para reducir el estrés al trabajar desde casa?
Demostrado queda que el estrés en el trabajo desde casa es una realidad que afecta a mucha gente. Sin embargo, no todo está perdido. Existen algunas estrategias para reducir el estrés y mejorar la calidad de vida en aquellos que trabajamos desde casa. A continuación, se encuentran algunas recomendaciones claves que pueden ser de utilidad para reducir el estrés en aquellos que trabajan desde casa:
Establecer horarios y rutinas
Uno de los principios fundamentales para reducir el estrés es establecer rutinas y horarios fijos. Al tener un horario definido para llevar a cabo nuestras tareas, evitamos el estrés que genera no saber cuánto tiempo llevará realizarlas. Si nos comprometemos a terminar nuestro trabajo a cierta hora, podremos dedicar el resto de nuestro día a nuestra vida personal.
Mantener contacto con otras personas
El aislamiento social es uno de los mayores factores de estrés en el trabajo desde casa. Por ello, mantener contacto con otras personas puede ser una herramienta fundamental para reducir el estrés. Ya sea a través de grupos de amigos, organizaciones de voluntarios o actividades deportivas, es fundamental mantener una comunicación fluida con otras personas y evitar sentirnos aislados.
Crear un espacio de trabajo propio
Otro factor importante que puede ayudarnos a reducir el estrés es disponer de un espacio de trabajo dedicado exclusivamente a nuestras actividades laborales. Lo ideal es contar con un escritorio y una silla cómoda que nos permita trabajar durante largas horas sin sufrir lesiones o dolores innecesarios.
Aceptar que no somos perfectos
Por último, una de las mejores maneras de reducir el estrés en el trabajo desde casa es aceptar que no somos perfectos y que podemos cometer errores. Este clima de aceptación es fundamental para mantener una perspectiva realista de nuestro trabajo y puedan tener un efecto terapéutico en nosotros.
Conclusión
En definitiva, el estrés en el trabajo desde casa es una realidad que afecta a muchas personas. Sin embargo, hay acciones que podemos tomar para reducir el nivel de estrés en nuestro día a día. Al establecer rutinas y horarios, mantener contacto con otras personas, crear un espacio de trabajo propio y aceptar que no somos perfectos, podemos disfrutar del trabajo desde casa y mejorar nuestra calidad de vida.