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Introducción
El estrés puede afectar más que tu estado mental. También puede tener un gran impacto en tu salud física, especialmente tu sistema digestivo. Cuando estás estresado, tu cuerpo produce más ácido gástrico que puede causar problemas estomacales. En este artículo, exploraremos los problemas estomacales comunes causados por el estrés y cómo prevenirlos.
Gastritis
La gastritis es una inflamación del revestimiento del estómago que puede causar náuseas, dolor de estómago, hinchazón, ardor estomacal y falta de apetito. El estrés crónico es una de las principales causas de gastritis. Cuando tu cuerpo está estresado, el ritmo cardíaco aumenta y la digestión se ralentiza, haciendo que el ácido permanezca en el estómago por más tiempo del que debería. Esto puede irritar el revestimiento del estómago y causar gastritis.
Úlceras estomacales
Las úlceras estomacales son llagas dolorosas en el revestimiento del estómago o en el intestino delgado. Los síntomas incluyen dolor de estómago, acidez estomacal, náuseas y vómitos. El estrés puede aumentar el riesgo de desarrollar úlceras estomacales. Aunque no causa la úlcera directamente, puede empeorarla al aumentar la cantidad de ácido gástrico en el estómago.
Helicobacter pylori
La bacteria Helicobacter pylori es una de las principales causas de úlceras estomacales. El estrés puede hacer que esta bacteria se multiplique más rápido, lo que a su vez aumenta la probabilidad de desarrollar úlceras estomacales.
Síndrome del intestino irritable (SII)
El síndrome del intestino irritable es una afección común que afecta el tracto gastrointestinal. También puede ser causado por el estrés. El SII se caracteriza por dolor abdominal, diarrea o estreñimiento, hinchazón y gases. El estrés puede agravar los síntomas del SII al afectar la manera en que los músculos del intestino se contraen y se relajan.
Prevenir problemas estomacales por estrés
- Practicar técnicas de relajación como la meditación o el yoga.
- Hacer ejercicio regularmente para reducir los niveles de estrés.
- Comer una dieta saludable y equilibrada para mantener el sistema digestivo en buen estado.
- Evitar alimentos que irritan el estómago, como el café, el té y los alimentos grasos.
- Tener un horario regular para comer y dormir para ayudar al cuerpo a establecer una rutina.